viernes, 28 de septiembre de 2012

La catedral de Oporto

La catedral de Oporto (Sé do Porto) está situada en el centro de la ciudad, junto a la parada de metro de São Bento. Su construcción comenzó a principios del siglo XII y se prolongó durante otros cien años. Como es habitual, ha sufrido diversas transformaciones a lo largo de la historia, y así el estilo románico original ha dado paso al barroco en la portada, modificada a finales del siglo XVIII, al igual que las torres. El altar mayor también data de esta época.

La catedral fue de las primeras cosas que vi en Oporto, ya que se encuentra en una ubicación privilegiada. Como comentaba en una entrada anterior, un buen punto de partida para dar una vuelta por la ciudad es la mencionada estación de metro de São Bento, que se encuentra a escasos metros de la catedral. Objetivamente hablando no me pareció gran cosa, sobre todo teniendo tan reciente la visita a la mezquita de Córdoba o a la catedral de Burgos, que son palabras mayores en lo que respecta a construcciones similares.




La ventaja es que la visita a la catedral de Oporto es gratuita (al menos casi toda la visita), y está permitido sacar fotos. Sin embargo el interior tampoco destaca especialmente, no es una catedral muy grande y no tiene de elementos que llamen poderosamente la atención. Por lo único que hay que pagar es para entrar al claustro, entrada que con carné de estudiante cuesta 2€, mientras que la normal es un euro más cara. El claustro, construido entre los siglos XIV y XV, sí que muestra algunos detalles más interesantes, como los mosaicos de azulejos que detallan diversos pasajes religiosos. Con la compra de la entrada se puede acceder al claustro y a algunas habitaciones interiores, con alguna pequeña exposición de piezas religiosas y algunas otras que tienen las paredes pintadas en una bonita decoración.



En general, la catedral de Oporto se muestra como una construcción bastante normal y con escasos detalles que puedan llamar la atención o que la hagan sobresalir especialmente, salvo la decoración del claustro o algunas algunas de las pinturas, que sí que aportaban algo destacable al conjunto. Sin ir más lejos, creo que la catedral de Évora es más bonita e interesante que esta. Eso sí, además de que es mayormente gratis, hay que tener en cuenta también que un punto a su favor es el mirador que se encuentra en su entrada, desde donde se pueden obtener unas vistas fabulosas al barrio de la Ribeira. Esto posiblemente sea lo más interesante de la visita.





4 comentarios:

  1. Qué fotos mas bonitas Raistlin!! Oporto es una ciudad que quiero conocer próximamente ^__^

    Gracias por tanta y buena información.

    Saludos!!

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  2. Entre sin creer algo llamaría mi atención pero no fue así, me gusto mucho esos azulejitos azules :D, la fotografía siguiente también me agrada esa pintura aunque no logro distinguirla se ve bien. Por cierto, para cuando una visita a Pastéis de Belém? :D
    Gracias por las fotos!!

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  3. Gracias! Iré subiendo más cosas de Oporto próximamente, y si necesitas información pregúntame si quieres, que yo llevo por aquí ya tres semanas y me quedan otros dos meses más xD

    Saludos!

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  4. Los azulejos en el claustro es lo mejor de la propia catedral, desde luego, además del mirador que hay a la entrada. El problema de las pinturas con las que decoran los edificios (catedrales, universidades, etc.) es que muchas de ellas se encuentran bastante deterioradas y hay zonas que se distinguen poco, es una pena...

    Para esa visita tengo que ir a Lisboa!! Quiero ir, pero no sé todavía cuándo me acercaré... Por supuesto haré foto si al final voy y paso por allí :D

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